viernes, 14 de septiembre de 2012

Ofrendas y Diezmos

2 Corintios 9:7
Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre.
Aun recuerdo cuando no conocía de las cosas de Dios, y una de las cosas que me hacia no buscar a Dios, era el hecho de que tenia que dar "ofrendas y diezmos" y conforme e ido caminando con Cristo, he aprendido mucho acerca de este tema, no te estoy diciendo que soy un teólogo, no, lo que te quiero compartir, es lo que Dios ha ministrado a mi corazón acerca de este tema.

Primero las ofrendas, el hecho de ofrendar a Dios lo vamos a encontrar desde Caín y Abel, ellos son los primeros que registra la Escritura que llevaban ofrendas a Dios, después, ya con Moisés al frente del pueblo de Israel, Dios lo hace mas formal y lo pone por escrito, haciéndoles ver que sus ofrendas tenían que cumplir con ciertos requisitos, no se podia ofrendar cualquier cosa, por ejemplo: no podia tener defectos, si era un animalito, tenia que ser las primicias si eran frutas por ejemplo, pero siempre tenia que ser lo mejor y lo primero.

Si bien es cierto que antes no se ofrendaba dinero sino especie, tenemos que entender que los tiempos han cambiado y ahora no podemos ofrendar como se hacia antes, lo que si es necesario, es que lo hagamos usando el mismo principio con el cual se empezó.

Ese principio es el de mostrarle a nuestro Creador, lo agradecidos que estamos con El, por todo lo que nos provee, por lo tanto, le damos de lo que El nos da, pero mas que la cantidad, o el valor de lo que ofrendamos, primeramente esta nuestro corazón, como esta nuestro corazón cuando estamos ofrendando?

Que es lo que Dios mira de nuestra ofrenda? por que en Caín y Abel tenemos un ejemplo muy claro que no importa lo que ofrendemos (verduras o animales) sino como esta nuestro corazón.

Por eso es muy importante que cuando apartemos nuestra ofrenda que le queremos dar a nuestro Señor, lo hagamos con un corazón agradecido, con gusto y con gozo, para que esa ofrenda sea de bendición.

En cuanto a los diezmos, el primer pasaje que encontramos acerca del diezmo esta en Génesis 14:17-20, cuando Abraham, dio el diezmo a Melquisedec, después lo encontramos en Malaquias 3:8, donde Dios le dice a su pueblo que le han robado en los diezmos y ofrendas.

Me he encontrado a muchos hermanos en la fe, que aseguran que ya no es necesario dar el diezmo de lo que ganamos en nuestro salario, pero la Escritura, no nos dice que dejemos de darlo, es decir, encontramos el inicio, pero no hay un pasaje donde Dios hablando nos diga que ya no le demos el diezmo de lo que ganemos por nuestro trabajo.

Por eso si me gustaría que antes de que usted querido hermano (a) en Cristo, deje de darle a Dios lo que a El le corresponda, por que alguien se lo dijo, consulte al que lo esta pidiendo, en este caso Dios.

Todo lo que hagamos en nuestro caminar con Cristo, debe ser pasado por la luz de las escrituras, y si esta mal, lo debemos de corregir, pero si esta bien, lo debemos de mantener, y mejorar cada día.

Por eso te invito a que escudriñes la escritura, bajo la dirección del Espíritu Santo y te dejes llevar por nuestro Señor y te darás cuenta de como estas caminado y si estas haciendo lo correcto o no.

Bendiciones!!